Defensores del consumidor advierten: La prohibición de sabores amenaza el progreso de la salud pública

Atenas, 16.4.2025. Organizaciones de consumidores y defensores del vapeo de Grecia y de toda Europa, incluyendo la Alianza Griega de Vapeadores y la Alianza Mundial de Vapeadores (WVA), están dando la voz de alarma sobre las medidas del Ministerio de Salud. prohibición propuesta on all vape flavours except tobacco and menthol. They warn that this measure risks reversing Greece’s hard-won progress in reducing smoking rates.

Desde 2019, cuando Grecia adoptó oficialmente la reducción de daños como pilar fundamental de su política de control del tabaco, el país ha revertido la tendencia creciente de tabaquismo que se observaba anteriormente, en marcado contraste con el estancamiento que se percibe en gran parte de la UE.

Michael Landl, director de la Alianza Mundial de Vapeadores, afirmó:

“La prohibición de los sabores sería un enorme paso atrás para la salud pública y la reducción de daños. Al apoyar la prohibición de los sabores, los legisladores empujarían a millones de adultos de vuelta al tabaquismo o al mercado negro, poniendo en peligro vidas e ignorando la evidencia científica. La investigación científica demuestra sistemáticamente que los sabores desempeñan un papel crucial para ayudar a los fumadores a dejar de fumar. El respaldo a la prohibición de los sabores ignora estos hallazgos y la clara voluntad popular. Esto causará más daño que beneficio."

Nikolas Christofidis, spokesperson for the Greek Vapers’ Alliance, added:

“Banning flavours in e-cigarettes is a superficial and dangerous decision. It does not target the real cause of use by minors, but it does punish hundreds of thousands of adult ex-smokers who have managed to quit smoking thanks to flavours. Instead of boosting harm reduction, they push them back to cigarettes or the illicit market. We call on the Ministry of Health to immediately reconsider this approach and to listen to the voice of consumers.”

Advocates urge the Ministry to engage with consumers, experts, and the scientific community to develop regulations that protect youth without sacrificing the health and freedom of adult ex-smokers. Evidence-based policies, not prohibition, are the path forward for public health.