Seguramente has visto titulares como este: “Los vapeadores tienen entre 5 y 7 veces más probabilidades de contraer COVID-19” que los no vapeadores. El revuelo mediático en torno a este supuesto dato proviene de un estudio de la Universidad de Stanford. Cualquier vapeador sabe que el alarmismo sobre el vapeo y la cobertura mediática van de la mano, y esta situación no es la excepción.
Y, como siempre, los medios de comunicación no tuvieron tiempo de analizar seriamente este estudio y hacer lo que deberían hacer: cuestionarlo y descubrir la verdad.
Así que decidimos hacer eso en su lugar.
El estudio no es concluyente y los resultados se interpretan erróneamente.
Dos académicos que analizaron este artículo pronto se dieron cuenta de que la verdad dista mucho de lo que se está informando.
El profesor Dr. Bernd Mayer, de la Universidad Karl-Franzens de Graz, Austria, expresó dudas sobre las cifras utilizadas en la publicación. Los autores no tuvieron en cuenta que los vapeadores declararon haberse sometido a pruebas nueve veces más a menudo que el grupo de control, lo que inevitablemente sesgó los resultados. Considerando esto, el resultado es muy diferente. En lugar de que los vapeadores tuvieran entre cinco y siete veces más riesgo que los no vapeadores, estos últimos registraron 13,71 TP4T de pruebas positivas de COVID-19 en el estudio, en comparación con los vapeadores, que registraron 13,11 TP4T de pruebas positivas. El profesor Mayer también mencionó que el daño ya está hecho por los medios de comunicación y expresó su temor de que, como consecuencia, la gente vuelva a consumir tabaco.
Konstantinos Farsalinos es otro académico reconocido mundialmente por su experiencia en el vapeo. Él planteó preocupaciones Con respecto a la metodología del estudio, argumenta, con razón, que este solo considera a las personas que han usado un cigarrillo electrónico al menos una vez en su vida, en lugar de a quienes lo usan de forma exclusiva y en la actualidad. Esta es la razón del aumento artificial en el número de vapeadores en riesgo.
Políticos en busca de su momento de protagonismo
Mientras los titulares sobre el estudio seguían llegando a los medios, un político estadounidense instó al organismo regulador nacional a prohibir los productos de vapeo. Se valió del sensacionalismo de los medios y del estudio sesgado para respaldar su afirmación. El 18 de agosto sabremos si la FDA atenderá a sus peticiones.
Dado que las noticias se propagan rápidamente, es muy probable que otros políticos hagan lo mismo. Pedir la prohibición de un producto del que muchas personas dependen para dejar de fumar captará la atención pública.
Por eso, debes estar preparado para alzar la voz de los vapeadores más fuerte que nunca.
Nos corresponde hacer todo lo posible para detenerlos.