El panorama de la reducción de daños del tabaco de esta semana ofrece una mezcla de preocupaciones políticas, datos de salud globales y reflexiones críticas sobre las prioridades de Europa.
Alberto Gómez Hernández, director de políticas de WVA, compartió recientemente una perspectiva contundente sobre el enfoque de Bélgica respecto a las leyes sobre el vapeo. una nueva entrevista En el Foro Mundial sobre la Nicotina (GFN), Alberto explica cómo la postura cada vez más restrictiva del país podría estar causando más daño que beneficio. En lugar de proteger la salud pública, estas medidas corren el riesgo de alejar a las personas de alternativas menos dañinas y hacerlas volver al tabaquismo. Aunque no residas en Bélgica, el mensaje tiene repercusión mundial. Los problemas que plantea reflejan las dificultades que enfrentan muchos defensores de productos de riesgo reducido y empresarios en sus respectivas regiones.
En cuanto a Latinoamérica, Brasil ofrece Un ejemplo contundente sobre lo que sucede cuando se prohíben por completo los productos de nicotina menos dañinos. El vapeo sigue siendo ilegal en el país, y las consecuencias ya se reflejan en los datos oficiales. Entre 2023 y 2024, el consumo de tabaco aumentó en 251 personas por cada 1000 habitantes, el primer incremento en el consumo de tabaco en Brasil en dos décadas. Estos datos constituyen una clara advertencia. Mantener los productos de riesgo reducido fuera del mercado legal no protege a la población; la expone a un mayor riesgo al eliminar herramientas comprobadas para dejar de fumar. La experiencia de Brasil subraya por qué defender el acceso a la reducción de daños es fundamental en todas partes.
Para nuestros lectores de habla alemana, el director de WVA, Michael Landl, ha publicado un análisis convincente sobre el rumbo actual de Europa. En su último blog, cuestiona si la Unión Europea está perdiendo el rumbo al optar por actuar como una autoridad moral global en lugar de impulsar una reforma real y muy necesaria. Su artículo ofrece una reflexión profunda sobre cómo las posturas políticas pueden estar debilitando la credibilidad de la UE al tiempo que no abordan los desafíos urgentes que enfrentan los ciudadanos europeos, en particular las generaciones más jóvenes.
Ya sean leyes erróneas en Bélgica, prohibiciones en Brasil o prioridades equivocadas en Bruselas, una cosa está clara: la lucha mundial por la reducción de los daños del tabaco está lejos de haber terminado. Pero con voces firmes, mejores datos y una defensa constante, contamos con las herramientas para seguir avanzando.
Estén atentos a más actualizaciones la próxima semana.