Bruselas, 13 de diciembre de 2023 Tras el respaldo del Subcomité de Salud Pública (SANT) de la UE el 7 de noviembre, el Parlamento Europeo, en sesión plenaria, ha aprobado el informe que reconoce el importante papel del vapeo como ayuda para dejar de fumar. Esta aprobación generalizada por parte del Parlamento marca un hito en la lucha contra las enfermedades relacionadas con el tabaquismo.

El informe, que forma parte de la iniciativa más amplia del Parlamento sobre enfermedades no transmisibles, no solo reconoce el vapeo como un método eficaz para dejar de fumar, sino que también debería marcar un nuevo rumbo para las políticas sanitarias de la UE. Sin embargo, la recomendación inicial del SANT de limitar el vapeo en ciertos espacios públicos sigue siendo motivo de controversia.

Michael Landl, director de la Alianza Mundial de Vapeadores, reflexiona sobre este último acontecimiento:

“La adopción íntegra de este informe por el Parlamento Europeo supone un avance. Subraya un cambio significativo en el reconocimiento del impacto positivo del vapeo en la salud pública. Instamos ahora a la Comisión Europea a que se alinee con esta perspectiva, ya que representa la voz y la decisión colectivas del Parlamento, los representantes directos de los ciudadanos de la UE. Escuchar esta voz no es solo una cuestión de política, sino de responsabilidad democrática.”

Para abordar las preocupaciones sobre el vapeo en público, Landl añade:

“Si bien celebramos el respaldo del Parlamento, las restricciones propuestas al vapeo en espacios públicos son preocupantes. Dichas medidas podrían obstaculizar inadvertidamente la transición de los fumadores a una alternativa menos dañina. Es fundamental basar las decisiones regulatorias en evidencia científica, distinguiendo el vapeo del tabaquismo. Abogamos por un enfoque regulatorio que apoye los objetivos de salud pública, respetando al mismo tiempo las diferencias entre fumar y vapear.’

La Alianza Mundial de Vapeadores mantiene su compromiso de promover la integración de estrategias de reducción de daños, como el vapeo, en las políticas de salud pública de la UE. Este enfoque es fundamental para reducir eficazmente las tasas de tabaquismo y combatir las enfermedades no transmisibles en toda Europa.