A menos de 100 días de la próxima conferencia mundial de la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre el control del tabaco, la Conferencia de las Partes (COP11), la Alianza Mundial de Vapeadores advierte que la COP11 se encamina a convertirse en ’otro desastre para la salud pública“. En lugar de impulsar el progreso, afirma la organización, la OMS y la Secretaría del Convenio Marco para el Control del Tabaco (CMCT) continúan su ”cruzada ideológica contra la reducción de daños, ignorando la ciencia, silenciando a los consumidores y cediendo a la influencia de los multimillonarios“.
A Nuevo documento de la Alianza Mundial de Vapeadores, El informe, publicado la semana pasada, revela cómo países como Suecia, el Reino Unido, Nueva Zelanda y Japón lideran la reducción del tabaquismo a nivel mundial al ofrecer alternativas menos dañinas como el vapeo, las bolsitas de nicotina y los productos de tabaco calentado. Estas estrategias están dando resultados tangibles: el tabaquismo en Suecia ha descendido a menos del 61% por persona al año, y las políticas basadas en la evidencia del Reino Unido han logrado que las tasas de tabaquismo alcancen su nivel más bajo de la historia. Mientras tanto, Japón redujo a la mitad las ventas de cigarrillos en tan solo ocho años al permitir alternativas tecnológicas.
Michael Landl, director de la Alianza Mundial de Vapeadores, dijo: “El dinero de Bloomberg puede comprar silencio en algunos círculos, pero la ciencia no puede ser enterrada para siempre. A 100 días del plazo, los países deben intensificar sus esfuerzos y resistir esta agenda elitista y anticompetitiva. La reducción de daños no es controvertida, salva vidas.”
Pero la Organización Mundial de la Salud no está interesada, según la Alianza Mundial de Vapeadores; en lugar de aprender de los éxitos, está redoblando la apuesta por el mensaje de abstinencia total, impulsada por grupos de presión privados contra el vapeo y la influencia política de financiadores multimillonarios como Michael Bloomberg.
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