Bienvenidos al tercer día de la COP11. Lamentablemente, no tenemos novedades que compartir hoy, ya que las voces de los consumidores y del público están siendo excluidas de estas importantes negociaciones sobre medidas que nos afectarán directamente. A puerta cerrada, es probable que las conversaciones sobre las llamadas "medidas prospectivas" estén en marcha.
Dado que no podemos estar presentes, es fundamental comprender qué está sobre la mesa. A continuación, un breve resumen de las propuestas prospectivas que afectan al vapeo, las bolsitas de nicotina y el tabaco calentado:
– Prohibición de todos los agentes aromatizantes y aditivos en los productos del tabaco.
– Establecer niveles muy bajos de contenido de nicotina en los productos de tabaco combustibles.
– Congelar la oferta de tabaco limitando las marcas y reduciendo las variantes del producto.
– Reducir el número de puntos de venta autorizados para vender productos de tabaco y nicotina.
– Aumentar la edad mínima legal para la venta de tabaco.
– Nacionalizar la venta comercial de productos de tabaco.
Clive Bates critica duramente estas medidas en su fantástico “CMCT COP-11: una guía de supervivencia para los delegados.” Advierte que prohibir los sabores esencialmente prohíbe o restringe severamente los productos más seguros, ya que los sabores son fundamentales para su aceptabilidad. Es probable que los bajos límites de nicotina en los cigarrillos empujen a los fumadores hacia productos ilícitos con alto contenido de nicotina en lugar de dejar de fumar. Las congelaciones de marcas y las restricciones de variantes de productos sofocan la innovación y ralentizan el cambio de los fumadores hacia el tabaco combustible. Limitar el acceso minorista aumenta los costos para el usuario y puede empujar a los consumidores hacia los mercados ilegales. Aumentar uniformemente la edad legal para todos los productos de nicotina pierde la oportunidad de fomentar el cambio a alternativas menos dañinas. Y nacionalizar las ventas de tabaco corre el riesgo de llevar los mercados a la clandestinidad sin reconocer los beneficios de los productos de nicotina más seguros. Bates argumenta que estas políticas punitivas y prohibicionistas socavan los esfuerzos de reducción de daños y, en última instancia, fallan a quienes intentan dejar de fumar.
Mientras esperamos las decisiones finales a puerta cerrada, la abrumadora tendencia en los últimos dos días de declaraciones de 104 países no ha sido alentadora. La mayoría sigue priorizando las prohibiciones y restricciones sobre la ciencia y la evidencia. Pero hay algunos rayos de esperanza: países como Albania, Macedonia del Norte, Serbia, Gambia, Mozambique, y San Cristóbal y Nieves han expresado su apoyo a la reducción de daños y a las políticas basadas en la evidencia. En particular, La UE fue bloqueada Algunos Estados miembros se oponen a estas medidas prospectivas, por lo que no se someterán a votación.
Seguiremos observando e informando. Recuerden, el verdadero progreso se logra con apoyo práctico, información honesta y brindando a los fumadores opciones más seguras, no más prohibiciones. Manténganse informados y comprometidos.
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