El 24 de marzo, la Administración de Alimentos y Medicamentos anunciado La agencia autorizó la venta en Estados Unidos de varios cigarrillos electrónicos con sabor a tabaco y dispositivos de calentamiento de tabaco fabricados por Logic. En su comunicado, la agencia afirmó que los cigarrillos electrónicos son “apropiados para la protección de la salud pública” y que sus beneficios superan los riesgos del tabaquismo juvenil.
Logic es una de las pocas empresas que fabrican productos alternativos al tabaco y que han recibido la aprobación previa a la comercialización de la FDA. En octubre de 2021 se concedió otra autorización para cigarrillos electrónicos al dispositivo de vapeo Vuse Solo y sus cápsulas de líquido electrónico con sabor a tabaco.
Si bien la decisión de la agencia de permitir el vapeo es una buena noticia para los vapeadores, la FDA hasta ahora ha fallado en regular los miles de productos y líquidos para vapear que ofrecen las pequeñas empresas. Esto está creando un mercado limitado que restringirá las opciones para los consumidores, lo que, a su vez, dificultará que los fumadores opten por alternativas menos dañinas.
Si bien la FDA reconoce la necesidad de intensificar los esfuerzos para reducir los daños y los beneficios de los productos de vapeo, está generando intencionalmente más perjuicios que beneficios al mostrar parcialidad hacia ciertos cigarrillos electrónicos y limitar el acceso al mercado de otras empresas. El año pasado, la FDA rechazó 55 000 solicitudes de comercialización de cigarrillos electrónicos con sabor por no presentar pruebas de que protegieran adecuadamente la salud pública.
La mayoría de las personas que cambian de cigarrillos tradicionales a cigarrillos electrónicos optan por productos con sabor a otros sabores. Sabores como fresa, mentol, melón, miel, etc., son populares entre los exfumadores. Muchos prefieren otros sabores al tabaco porque este les recuerda el sabor del cigarrillo, lo que podría hacer que muchos vuelvan a fumar, rechazando así todos los esfuerzos de reducción de daños. Un estudio reciente realizado por la Alianza Mundial de Vapeadores y el grupo de defensa del consumidor Consumer Choice Center reveló que si Estados Unidos prohibiera los sabores en los cigarrillos electrónicos, más de 7,7 millones de vapeadores volverían a fumar.
Durante décadas, Estados Unidos ha sido líder en innovación global, revolucionando soluciones en tecnología, atención médica y reducción de daños. Sin embargo, con las tendencias actuales en las aprobaciones de PMTA, la FDA está creando obstáculos que impiden a muchos consumidores dejar de fumar y mejorar sus vidas.
Para proteger la salud pública, la FDA necesita otorgar acceso a muchas más empresas, permitiéndoles ingresar al mercado del vapeo con sus productos y sabores, para crear más opciones y oportunidades para que los fumadores dejen de fumar y adopten un estilo de vida más saludable.