Una coalición de vapeadores pide al Departamento de Salud australiano que ponga fin a la represión contra las empresas y los consumidores de vapeo.

En el Carta publicada el miércoles 20 de julio de 2022, Activistas del vapeo de todo el mundo instaron al Departamento de Salud australiano a detener la represión contra los negocios legales de vapeo y, en cambio, buscar otras medidas regulatorias. Además de la destrucción de negocios, la coalición teme que estas medidas perjudiquen a los consumidores, empujándolos al mercado negro.

La carta se publicó después de que los propietarios de tiendas de vapeo de Australia Occidental recibieran un aviso de 14 días para cesar sus operaciones por parte de los inspectores del departamento de salud de Australia Occidental.

Diecisiete organizaciones de consumidores de vapeo de todo el mundo firmaron la carta en apoyo de los vapeadores de Australia Occidental.

Michael Landl, director de la Alianza Mundial de Vapeadores (World Vapers' Alliance), grupo de defensa global del vapeo, declaró:

“El vapeo ha sido un salvavidas para más de 80 millones de personas que luchaban por dejar de fumar. Es la herramienta más eficaz para dejar de fumar hasta la fecha, reconocida en países como el Reino Unido, Francia y Nueva Zelanda, entre otros. Cerrar las tiendas de vapeo no solo obligará a los vapeadores a recurrir al mercado negro en busca de sus productos preferidos, sino que también impedirá que muchos fumadores dejen el cigarrillo tradicional, ya que tendrán dificultades para encontrar alternativas. Al restringir el acceso a herramientas de reducción de daños mientras mantiene los cigarrillos tradicionales en el mercado, el gobierno de Australia Occidental está abriendo las puertas a una catástrofe de salud pública.”

En la carta enviada al Honorable Mark McGowan, Primer Ministro de Australia Occidental, las 17 organizaciones señalan que la cláusula de la Ley del Tabaco, que prohíbe la venta de todos los materiales y líquidos para vapear, a la que se refieren los inspectores de sanidad, no existe. La carta también explica que la falta de productos de calidad y de asesoramiento, como consecuencia del cierre de las tiendas de vapeo, perjudicaría a los consumidores que intentan dejar de fumar o que ya lo han hecho gracias al vapeo.

Brian Marlow, director de campaña de Legalise Vaping Australia, dijo:

“El vapeo ha ayudado a millones de australianos a dejar de fumar, pero sin acceso a información fiable y productos de calidad en el mercado, muchos de los vapeadores que lograron dejar de fumar gracias al vapeo corren el riesgo de recurrir al mercado negro o volver a fumar por completo. La actual política de represión contra las tiendas de vapeo pone en riesgo la vida de millones de habitantes de Australia Occidental y debe abordarse de inmediato.”

Los firmantes de la carta piden al Departamento de Salud que revise la política de represión actual y piense en soluciones regulatorias alternativas para combatir el comercio ilícito en Australia Occidental.

FIN